La manifestación

La manifestación se produce mediante una serie de reacciones a lo que tú pides y emites desde tu consciencia interna. Partiendo desde tu corazón, manifestar es dar rienda suelta a tu creatividad para materializar tus objetivos. Es un paso después de la atracción y es la respuesta a la causa de tu propuesta, o sea el efecto.

 

Nuestras respuestas a la vida las llevamos a cabo mediante la manifestación.

Hay distintas posibilidades de manifestar:

  •  Una de ellas es la palabra, que genera distintas reacciones en ti y en los que las escuchan.
     

  • Otra es la escritura, que genera distintas reacciones al leerla.
     
  • Otra es la mente, que prepara ideas que pueden materializarse y que también producirá reacciones.

 

La manifestación de la energía de la suerte es un logro, una bonificación, un resultado, que llega cuando estás en sintonía con las leyes universales y recibes los frutos de esa conexión, que preparaste con tus actos, tus decisiones y acciones. Es lo que vibras con tu corazón.

Nuestros guías se manifiestan mediante las elecciones que hacemos desde el corazón, es el resultado de una llamada consciente o inconsciente, y surge la manifestación. Es el resultado de la atracción.

 

Pongamos, una idea surge de una curiosidad, de una necesidad o captar, ver un hueco que falta algo, lo que podríamos decir un NICHO en términos de comercio que no está cubierto y para cubrirlo buscamos una idea, un presentimiento, una intuición de la cual creamos un producto, y esto es la manifestación: pido al universo una idea para cubrir este nicho y el universo, la creación me la facilita.

 

En términos cotidianos la manifestación se construye y destruye según la facilidad que hayamos adquirido en autosabotearnos con nuestras dudas en vez del análisis, el miedo en vez de la precaución, la crítica en vez del apoyo o el ejemplo, el juicio en vez del acompañamiento.

 

La manifestación requiere una energía constante, fluida, en la dirección que construye. Por ello, toda información que sea contradictoria hacia el objetivo, negativa, retrasa o destruye la manifestación.

Ejemplos:

  • ¡¡compro loteria!! y pongo el pensamiento de que no me va a tocar
  • ¡¡mira que chica-chico más guapo!! no me lo merezco.
  • ¡¡mira que casa tan bonita!! yo no la podre tener nunca.


Esto es el auto sabotaje. Con lo cual manifestamos la constante contradicción.

 

Los ladrones de ideas, cuando hablas de una idea con alguien, ten cuidado que por muy amigo o familia que sea puede destruir con su mensaje lo que con mucha ilusión buscas materializar. Los ladrones de ideas destruyen y roban la energía de la construcción, tu pones la energía tengo un proyecto muy bonito... o me hace mucha ilusión..... y sale el amigo o el familiar con esto no te saldrá bienhay mil que lo hacen mejor y tienen muchísima más experiencia, con esta idea te arruinarás, vamos yo no pongo en este proyecto ni una gota de energía etc, así tu idea se desvanece porque le han cortado el inicio de raíz.

 

La manifestación se lleva a cabo con la ilusión, el apoyo, el refuerzo, el moldeado del objetivo, es como un dibujo que va creando una imagen que previamente no habías concebido, consiguiendo en pasos sucesivos la materialización, y entonces decimos que suerte he tenido, o me ha acompañado la suerte.